El cofundador del extinto Cártel de Guadalajara es uno de los criminales más buscados de la DEA por el asesinato de "Kiki" Camarena

El narcotraficante mexicano Rafael Caro Quintero, uno de los más buscados por la Justicia estadounidense, perdió su última apelación legal contra una posible extradición a Estados Unidos.

Un funcionario judicial federal, que habló con Reuters bajo condición de anonimato, confirmó el fallo contra Caro Quintero, quien es buscado por el secuestro y asesinato en 1985 del agente de la DEA, Enrique "Kiki" Camarena.

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El viernes, un tribunal de la Ciudad de México rechazó la apelación de Caro Quintero, quien pasó a la clandestinidad después de su liberación en 2013, donde pasó casi tres décadas por el asesinato de Camarena.

Los jueces desestimaron por mayoría de votos la apelación de Caro Quintero, quien aseguraba que los delitos por los que Estados Unidos quiere procesarlo eran estrictamente un asunto de la justicia mexicana.

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Caro Quintero, de 68 años, ha negado anteriormente su participación en el asesinato de Camarena, un crimen notorio que ensombreció las relaciones de seguridad entre Estados Unidos y México.

Los fiscales estadounidenses quieren juzgar a Caro Quintero en Estados Unidos y buscan su extradición.

El llamado "narco de narcos", cofundador del extinto y poderoso Cártel de Guadalajara junto Miguel Ángel Félix Gallardo y Ernesto Fonseca Carrillo, alias "Don Neto", está en la lista de los más buscados de la DEA y pesa sobre su cabeza una recompensa de 20 millones de dólares.

El 9 de agosto de 2013, Caro Quintero fue liberado del penal Puente Grande debido a errores en su proceso en el caso del asesinato de Camarena. También fue absoluto de otros delitos como secuestro, homicidio y delitos contra la salud.

El Primer Tribunal Colegiado en Materia Penal con sede en Guadalajara resolvió que Caro Quintero no debió ser juzgado en tribunales federales por el delito de secuestro y homicidio calificado en agravio del agente de la DEA Enrique Camarena Salazar, ya que su proceso debió haber sido llevado en un juzgado del fuero común, por que la víctima en ese entonces no ostentaba ningún cargo diplomático que justificara que el presunto homicida fuera procesado en instancias federales.

En 2009, un juez mexicano determinó que por acumulación de las penas que tenía en su contra, a Caro Quintero le correspondían 199 años de prisión, pero por ley sólo se le pudo imponer una máxima de cuarenta años.

Fuentes de la entonces Procuraduría General de la República (PGR) habían dicho que investigaban si había una solicitud de extradición contra el capo, por parte de la justicia estadounidense.

Las fuentes explicaron que Caro Quintero, nacido en Badiraguato, Sinaloa, fue sentenciado por delincuencia organizada y delitos contra la salud (narcotráfico), y procesado por el homicidio de Camarena, "pero no condenado".

 

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